Entrevista con Katya para Spanish Property Insight
Katya Moshnikova, una de nuestras agentes "senior" de Urbane, fue entrevistada por Spanish Property Insight sobre la demanda rusa de viviendas en España desde la invasión de Ucrania por parte de Putin. Rusia es un mercado potencialmente enorme para la propiedad española, y no hace mucho tiempo era el tercero más grande, pero las acciones de Vladimir Putin en Ucrania siguen derribando el mercado. Ya en 2014 Rusia era el tercer mercado de "exportación" de propiedades en España, por detrás de Reino Unido y Francia, en un momento en el que los rusos tenían libertad para viajar e invertir en Europa. Al igual que otros europeos del norte, los rusos descubrieron la alegría de las vacaciones en las costas españolas y los atractivos de tener una casa de vacaciones en España. Lugares como Marbella atrajeron a los oligarcas, e incluso se rumorea que Putin posee una elegante villa en la zona. Como se puede ver en el gráfico anterior, la demanda rusa aumentó fuertemente en los años posteriores a la crisis financiera, alcanzando un máximo de 3.121 ventas en 2014, cuando Rusia representó el 8% del mercado extranjero, sólo por detrás del Reino Unido (17%) y Francia (10%). Apenas tres años antes, la cuota de mercado de Rusia había sido del 4%, por lo que la demanda rusa de inmuebles en venta en España atravesaba un periodo de crecimiento fenomenal y el país iba camino de convertirse en el segundo mercado más importante después del Reino Unido. Entonces, como ahora, las acciones de Putin en Ucrania hicieron que el mercado cayera en picado. Tras la anexión de Crimea en 2014, el rublo ruso se redujo a la mitad ese año y la UE impuso sanciones económicas a Rusia. Como resultado, las ventas cayeron un 43% en 2015 y un 14% en 2016, al desplomarse el poder adquisitivo de los rusos en el extranjero. "La demanda rusa se secó casi de la noche a la mañana con la anexión de Crimea en 2014", dice Ekaterina Moshnikova, consultora inmobiliaria de Urbane International Realty, ahora con sede en Barcelona. "No es que la gente ya no quisiera comprar, es que no podía hacerlo. Creo que ahora veremos lo mismo a mayor escala". La demanda rusa de viviendas en venta en España sí empezó a recuperarse modestamente después de 2016, con ventas en 2019 que volvieron a superar las 2.000, pero la pandemia puso fin a ese crecimiento en 2020, como en todas partes. Ahora la guerra de Putin contra Ucrania, y las sanciones económicas sin precedentes de Occidente en respuesta, van a aplastar las ventas en el futuro inmediato. También parece que va a haber un aumento de la emigración desde Rusia, ya que los opositores al régimen (los rusos más "occidentalizados") intentan salir, si pueden. Podrían alimentar la demanda de viviendas en países europeos como España, pero mientras las sanciones occidentales y los controles de capital rusos dificulten la salida de dinero de Rusia, es difícil ver cómo se convierten en compradores. Fuente: Spanish Property Insight